Trayecto a una vida digna
Palestina se encuentra en la costa Este del Mar Mediterráneo. Esta denominación se suele referir en la actualidad a los territorios gobernados por la Autoridad Nacional Palestina.
Muchos palestinos han emigrado a Hispanoamérica, principalmente a Chile. Lo han hecho en diferentes oleadas y épocas: la primera en el siglo XIX y en la actualidad se sigue repitiendo el fenómeno. Otros destinos son Australia, Europa y África.
América representa, para ellos, una tierra de oportunidades, libertad y esperanza. De ahí que los palestinos formen la segunda colonia, después de la española, en Chile.
Los emigrantes realizan un largo y duro viaje que es una auténtica proeza, abandonan a su familia, amigos, parientes y su idioma, llevándose con ellos sólo la incertidumbre y la esperanza.
Actualmente, muchos palestinos han viajado a África, utilizando excavadoras para derrumbar el muro que les separa de Egipto. Éstos traspasan la valla fronteriza a pie en busca de comida o medicamentos que no tienen en su región.
Conviven con la muerte, el hambre (un alto porcentaje de niños con malnutrición), la destrucción, la pobreza, la guerra y la violencia (barrios enteros han sido arrasados en la guerra).
El conflicto Israel-Palestina ha ocasionado la guerra. Los muros construidos por Israel( para proteger a sus ciudadanos de los ataques de los palestinos) afectan profundamente a sus vidas ya que separa, muchas veces, a los niños de sus escuelas, los pacientes y sus médicos,…Muchos enfermos mueren en las carreteras.
Una vez llegados a su destino, se encuentran con el inconveniente del idioma. Los más afortunados que consiguen comunicarse trabajan casi día y noche para reunir todo lo que ganan, gastando sólo el dinero necesario para la comida, comprarse ropa o cortarse el pelo son “caprichos “que no se pueden permitir con un salario tan bajo.
Palestina sufre una crisis económica sin precedentes y una gran inestabilidad política. Por todo ello, sus habitantes deben emigrar.
Palestina se encuentra en la costa Este del Mar Mediterráneo. Esta denominación se suele referir en la actualidad a los territorios gobernados por la Autoridad Nacional Palestina.
Muchos palestinos han emigrado a Hispanoamérica, principalmente a Chile. Lo han hecho en diferentes oleadas y épocas: la primera en el siglo XIX y en la actualidad se sigue repitiendo el fenómeno. Otros destinos son Australia, Europa y África.
América representa, para ellos, una tierra de oportunidades, libertad y esperanza. De ahí que los palestinos formen la segunda colonia, después de la española, en Chile.
Los emigrantes realizan un largo y duro viaje que es una auténtica proeza, abandonan a su familia, amigos, parientes y su idioma, llevándose con ellos sólo la incertidumbre y la esperanza.
Actualmente, muchos palestinos han viajado a África, utilizando excavadoras para derrumbar el muro que les separa de Egipto. Éstos traspasan la valla fronteriza a pie en busca de comida o medicamentos que no tienen en su región.
Conviven con la muerte, el hambre (un alto porcentaje de niños con malnutrición), la destrucción, la pobreza, la guerra y la violencia (barrios enteros han sido arrasados en la guerra).
El conflicto Israel-Palestina ha ocasionado la guerra. Los muros construidos por Israel( para proteger a sus ciudadanos de los ataques de los palestinos) afectan profundamente a sus vidas ya que separa, muchas veces, a los niños de sus escuelas, los pacientes y sus médicos,…Muchos enfermos mueren en las carreteras.
Una vez llegados a su destino, se encuentran con el inconveniente del idioma. Los más afortunados que consiguen comunicarse trabajan casi día y noche para reunir todo lo que ganan, gastando sólo el dinero necesario para la comida, comprarse ropa o cortarse el pelo son “caprichos “que no se pueden permitir con un salario tan bajo.
Palestina sufre una crisis económica sin precedentes y una gran inestabilidad política. Por todo ello, sus habitantes deben emigrar.
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